Pato asado crujiente al estilo Pekín. Receta

Como sabéis, el pasado domingo comenzó un nuevo año chino, que en esta ocasión corresponde a un año de la Serpiente. Según la tradición china, estos años son años de crecimiento y esplendor, así que ojalá sea así, incluso para nosotros. Para celebrar el año nuevo chino he preparado un pato asado crujiente, al estilo Pekín que espero que os guste.

Lo bueno es que en realidad no lo he preparado, ya que encontré en una tienda de productos orientales un pato que viene ya asado y deshuesado por lo que lo único que me tocó hacer fue regenerarlo para que estuviera en su punto, dorarlo y preparar las típicas crepes rellenas de la carne de pato con cebolleta y salsa hoisin. Veréis qué fácil.

2013, año de la serpiente

Ingredientes para 5 personas

• 20 crepes chinas, un pato deshuesado (550 gr aprox), una cebolleta fresca y salsa hoisin

Cómo hacer pato asado crujiente al estilo Pekín

Seguro que pronto me animaré a preparar esta receta de la forma tradicional, tensando el pato con agua hirviendo, colgándolo para estire y después asando la pieza para darle el laqueado tradicional, durante unas cuantas horas.

Sin embargo, como lo he visto tan fácil y tan rico en un preparado congelado que compré el otro día, quiero enseñároslo para que veáis qué facil es hacerlo en casa con este producto. Además es que sale buenísimo y no llegó a los 7 euros, así que, creo que es todo un hallazgo.

El producto viene envasado y congelado por lo que tras dejarlo 12 horas en la nevera y dos horas más fuera, está perfectamente descongelado y listo para trabajar con él. Como veis en las fotos, el pato viene separado en dos partes, con una pechuga, un ala y una pata en cada una, pero totalmente deshuesado.

Para regenerarlo y dejarlo listo para comer, según indica el envase se puede hacer tanto en el microondas como en el horno convencional. En este último, habría que meter las piezas en una fuente, barnizarlas con un poco de salsa hoisin por la piel y darle calor a 200ºC durante unos 15 minutos, para que la piel alcance un punto crujiente.

Si optáis por el microondas, la carne quedará más jugosa que en el horno, pero no podréis conseguir el crujiente en la piel. Yo por ese motivo opté por separar la piel de la carne, para poder torrarla bien en la plancha. (De paso así le retiramos parte de su grasa) Una vez bien tostada la cortamos en pequeñas tiras de unos 3 mm de grosor.

La carne, la cortamos también en tiritas finas y la calentamos un par de minutos en el microondas y ya la tenemos lista para formar los clásicos crepes chinos. 

Por suerte en la misma tienda los encontré, venden los crepes también congelados y para tenerlos listo, basta con cocinarlos un par de minutos al vapor para estar perfectos y manejables. 

Ahora lo llevamos todo a la mesa para que cada uno se prepare sus crepes cargándolos a su gusto. Cada cosa en un platito, para que quede perfecto. En un plato la cebolleta, en otro las tortitas o crepes, la carne y la piel cortada y en el centro, la salsa de pato Pekin.

Para rellenarlos, picamos una cebolleta fresca en juliana bien fina y ponemos sobre cada crepe, un poco de carne, un poco de cebolleta una tirita de piel crujiente y una cucharadita de salsa hoisin. Lo enrollamos y listos para disfrutar. Fácil ¿verdad? Pues están de muerte, en serio. ¿Os apetece un rollito?

Feliz año nuevo, y claro, sed felices,