Conociendo más de los productos de alimentación de Irlanda con Board Bia

Hace unos días tuve la suerte de asistir a una cena en la que Bord Bia, una empresa semiestatal de Irlanda que promueve sus productos de alimentación, presentaba los alimentos de Irlanda a profesionales de la restauración y medios de comunicación. El evento tuvo lugar en el restaurante madrileño de Pedro Larumbe en el edificio ABC.

Con asistencia de muchísimos chefs y restauradores de renombre, la presencia del embajador irlandés Justin Harman, la gran organización y tan buenos productos, el éxito del evento estaba asegurado.

Irlanda no es sólo Guinness, Baileys y Jameson, también es un grandísimo productor de carne, quesos etc. Se caracteriza por producir alimentos sostenibles, ecológicos y bajo vigilancia para asegurar la sosteníbilidad, control de producción y respeto por medio ambiente. 

Comenzamos con una cata de whiskys, para diferenciar entre el whiskey irlandés, el whisky escocés y el bourbon o whiskey americano. Nada más probar cada una de las muestras, pudimos distinguir muy claramente las notas características de cada uno de ellos.

 

Tras la cata, comenzaba lo mejor. Cristina Ruiz, directora de Board Bia en España nos habló de los procesos sensibles con el medio ambiente y sostenibilidad con que trabajan sus productos, los sistemas de obtención, cuidado, origen de cada uno de los productos, que iba seguido de la degustación del mismo. Asi pudimos probar las excelentes vieiras irlandesas, y posteriormente su carne, que vino representada por unos solomillos de buey Angus de excelente calidad y ternura.

Las carnes

Coincidió que en nuestra mesa estaban sentados los representantes de la distribuidora de empresa cárnica irlandesa, por lo que nos pudieron ampliar la información sobre este producto. Yo no sabía que Irlanda es uno de los principales exportadores del mundo de carne. Pudimos saber que se exporta más buey que ternera o vaca, exportando el noventa por ciento de su producción. Casi todo el ganado se alimenta exclusivamente con pasto y muchos de los ganaderos son part time farmers, ya que tienen otra ocupación principal.

La preocupación por el medio ambiente y por el bienestar del animal y la experiencia para que la carne esté en su punto, son las características de los productores, para  con grandes sensaciones organolepticas bajo programa de calidad. Las razas del ganado son principalmente, la charolés, la limosina azul, la belga y la Hereford y la Angus negro de maduración rápida.

Mariscos y productos del mar

El Buey de mar sale de las costas de Noruega y esta en su punto al pasar por Irlanda, siendo capturado entre agosto y noviembre. El sistema de captura es por nasas. El 90% salmón de Irlanda es ecológico. Se alimenta de productos naturales, y de harina de pescado apta para el consumo humano, sin contenido de GMO. Las Vieras se crían y capturan en toda la costa de Irlanda mayoritariamente en el sur, durante todo el año. Su carne es fina y muy apreciada. En el restaurante de Larumbe, la pudimos disfrutar a la plancha, sobre una ensalada muy refrescante con salsa de teriyaki y naranja.

Los lácteos y quesos

En Irlanda no hay quesos regionales como ocurre por ejemplo con el queso manchego en España, sino que cada productor hace su propio tipo de queso a excepción del Cheddar o algún otro más extendido, todos son quesos muy particulares. 

En concreto, pudimos probar gracias a La Boulette, (que hizo la selección) un queso de vaca con leche no pasterizada (exquisito y de sabor potente) llamado Daru, un queso de corteza gris de oveja, con leche pasterizada, llamado Crozier Blue, y finalmente un queso ahumado llamado Carrigaline, que fue el que más me gustó, me pareció que era un queso muy bien afinado y con unas notas de sabor muy interesantes.

La cena terminó con un postre, consistente en una Creme Brulee con Baileys, muy conseguida de sabor. Los vinos con que se armonizó la cena fueron de la empresa española González Byass, que ha apoyado también la celebración de otros eventos como la cena por San Patricio en el Circulo de Bellas Artes.

En resumen, fue genial poder conocer de primera mano las excelencias de los productos de Irlanda, y sin duda lo que más me gustó fue como han hecho de la calidad, sostenibilidad y respeto al consumidor y al medio ambiente su bandera para convertirse en un país fundamentalmente exportador de productos tradicionales y muy cuidados, que los consumidores valoramos muy positivamente en nuestra mesa.

Si ya tengo cariño a Irlanda, por haber sido el primer país que visité en mi infancia, cuando viajé allá para aprender inglés, ahora aún le tengo más cariño por su buen hacer y su calidad. Para terminar, quiero hacer un brindis por el éxito de estos productos irlandeses y todo mi apoyo a los productos tradicionales y de calidad. Slancha!!

Sed felices,

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