Brochetas crujientes de pollo al estilo oriental

Esta receta es una receta imprescindible. El sabor del pollo es alucinante, la textura crujiente del exterior en contraste con lo tierno del interior es algo incréible. Vamos, que no puedo más que decir que esta receta de brochetas crujientes de pollo al estilo oriental es de las que quedan oficialmente incluidas en las de "Esta la hago cuando vengan amigos a cenar a casa".

La idea de esta receta surgió en una clase de cocina de la Escuela Telva. Desde que me la enseñaron he probado con distintos rebozados hasta dar con éste que es el perfecto, el que queda bien crujiente y con un dulzor que sorprende. Y el marinado, lo he adaptado un poco hasta conseguir el sabor intenso de estas brochetas que tenéis que probar.

Cuando empecé a asistir a las clases de la Escuela de Cocina Telva, no me esperaba que me iban a venir tan bien. No es sólo por las recetas que preparamos cada semana ni por todo lo que aprendo, sino por todas las ideas que se me van ocurriendo a partir de las sugerencias, preguntas y dudas que resolvemos durante las clases. Sea cual sea vuestro nivel, os recomiendo que si podéis hagáis alguno de los cursos que imparten porque seguro que os gustarán tanto como a mí.

Ingredientes para 4 personas


Para las brochetas: 2 pechugas de pollo, un plato con coco rallado, 2 huevos y un plato con cereales en copos de vuestra elección. (Yo uso los Extra Original de Kellogs, aunque también queda muy bien con los clásicos Corn Flakes, con copos de arroz, con Muesli o incluso con panko)
Para el marinado: 100 ml de salsa de soja clara, 20 ml de salsa de soja oscura, 50 ml de aceite de sésamo, 20 ml de mirin y 1 diente de ajo muy picado

Cómo hacer brochetas crujientes de pollo al estilo oriental


La primera fase de esta receta es el marinado del pollo. Comenzamos cortando las pechugas en trozos (pueden ser de tamaño bocado o medianos, a vuestro gusto). La misma receta la podéis hacer con magro de cerdo o con pavo y también os encantará. 

Para el marinado: En un bol mezclamos los líquidos que indicamos en los ingredientes y añadimos el ajo picado. Lo recomendable es dejar las tajaditas de pollo marinando durante al menos 3 horas, pero con media hora ya toman suficiente sabor. Recordad que no hace falta usar sal porque con la que aporta la soja es suficiente.

Para el rebozado: En lugar de hacer el tradicional rebozado harina - huevo - pan rallado (recordad el truco de ponerlos por orden alfabético para saber cual va primero) en esta ocasión vamos a sustituir la harina por coco rallado y el pan rallado por los copos de cereales.

Sacamos y escurrimos bien las tajadas del pollo de la marinada, las pasamos por el coco, luego por huevo y finalmente por los copos. Conviene apretar con la palma de la mano sobre las tajadas para que los copos se adhieran bien a cada tajada.

Freímos en una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra, que tendremos bastante caliente para que se haga rápido y no se reseque el interior y dejamos sobre papel absorbente antes de montar las brochetas.

Servimos las brochetas crujientes de pollo al estilo oriental y ponemos unos cuencos con un poco de salsa soja clara para que quien quiera pueda tomar cada bocado mojándolo en la salsa. Por favor, fiaros de mí una vez más y no se os olvidará esta receta que resulta excelente para aperitivos, cenas y como pikis-pikis para comenzar una reunión de amigos.

Sed felices,