Borrachitos de Macallan y su gelatina, dos recetas con whisky para disfrutar
No es que hallamos caído borrachitos de whisky The Macallan, sino que he preparado unos bizcochos borrachos, con un baño de este estupendo whisky escocés y los he acompañado de unas gelatinas de whisky y de cocacola que podeís ver en la foto superior. Os cuento como surgió esta historia, y por supuesto, la receta.
Hace unos meses, asistí con algunos amigos a una presentación de whisky de malta The Macallan, en la que pudimos degustar una cata en vertical de este magnifico Single Malt Whisky, de 12, 15, 18, 25 y 30 años, lo cual fue toda una experiencia.
Primero por el grupo, ya que compartí mesa con buenos amigos en el Gastro de Sergi Arola, donde probamos un interesante menú, en armonía con la cata vertical de whisky.
Ni que decir tiene que siendo un "whiskero" como yo, disfruté enormemente de este whisky de gran calidad, característico de Speyside, una zona de gran tradición en destilerías de Escocia. Este whisky puro de malta, se destila en pequeños alambiques, y de su producción sólo una pequeña parte o corte, pasa a madurar en barricas.
En su proceso, la gama Fine Oak, pasa por tres clases de barricas, primero en barrica de roble español con aroma de vino de Jerez, después en roble americano también con Jerez, y finalmente en roble americano aderezado con bourbon. Ese proceso aporta diferentes matices y aromas al whisky The Macallan, por lo que está considerado como uno de los mejores que podemos encontrar.
Pues días después, me enviaron una pequeña botella a casa, para que pudiera preparar una receta original con ella, y aquí estoy, presentandoos estos bizcochos borrachitos de Macallan y unas gelatinas en formato lasaña.
Las gelatinas:
Para preparar la lasaña de gelatinas, utilicé un sobre de 4 gr de agar agar en polvo, (en herbolarios) y lo repartí en dos mitades.
Con una de ellas, preparé según las instrucciones del fabricante 125 ml de Coca cola que llevé a ebullición, tras quitarle la presión para que no tuviera burbujas. Mezclé, dejé enfriar extendido en una fuente y corté en cuadraditos.
Con la otra mitad del sobre, hice la misma operación con 75 ml del whisky The Macallan, y preparé otra gelatina que también extendí en otra fuente y dejé enfriar en la nevera. Una vez fría y cortada la gelatina del whisky, monté unas lasañas alternando capas de las dos gelatinas obteniendo este resultado. Las más oscuras son las capas de cocacola y las más claritas las de whisky.
Los borrachitos de Macallan:
Para hacer los Bizcochitos Borrachos de Macallan, quería hacer una versión para adultos de los bollos Bony de cuando era pequeño, con el bizcocho, la mermelada y la cobertura de chocolate. ¿Os acordáis de los Bony? Pero para darle un punto simpático, añadí unas semillas de amapola.
Preparé un bizcocho clásico, con 2 huevos, 100 gr. de mantequilla, 100 gr. de azúcar y 150 gr. de harina y medio sobre de gasificante (levadura química Royal). Añadí un buen puñado de semillas de amapola y batí toda la mezcla y la extendí sobre una bandeja de horno. Lo horneé durante unos minutos para que quedase un bizcocho fino de un cm de altura aproximadamente, que no se tostase mucho. Aproximadamente 15 minutos a 175ºC con ventilador.
Una vez horneado, lo pincelé con unos 50 ml de The Macallan, dejando que el bizcocho absorbiera el líquido. Una vez en frío, lo corté en pequeños rectángulos, y unté la mitad de ellos con mermelada.
Tenía en casa una mermelada de Guayaba y Maracuyá de comercio justo que había comprado a Intermon Oxfam y me pareció que al no ser demasiado dulce le iría bien a este invento.
Luego tapé los borrachitos con otra capa de bizcocho, y los puse en una rejilla para proceder a bañarlos en chocolate de cobertura. Primero una mitad, y cuando estuvo fría y endurecida de nuevo, les dí la vuelta y bañé la otra mitad. El proceso completo, podéis verlo paso a paso en el fotomontaje o collage que hay más arriba. Para decorar, un espolvoreado de azúcar glas.
Un resultado muy interesante, crujiente de chocolate, suave bizcocho con aromas de escocés, y el toque ácido de la mermelada. Y encima al masticar, pequeños crujiditos de amapola. Una delicia. Y mirad por dentro cómo quedan, de auténtico lujo.
Lo único malo es que entre las gelatinas y los borrachitos, mi botellita mini de whisky The Macallan, está en las últimas.
Sed felices, yo voy a brindar con los restos de la botella, por el 5º año de Lazy Blog, que empieza mañana día 19 de mayo. ¡¡Salud!!