Cómo hacer un café Irlandés perfecto en el día de San Patricio, mi Receta de Irish coffee


Hace muchos años, cuando yo no tenía más que doce o trece, mis padres me enviaron a Dublín para que aprendiera inglés. Recuerdo que el nombre de la zona donde vivía era Rathfarnham, un barrio residencial en las afueras de la ciudad y recuerdo también los nombres de mi familia irlandesa, los Mangan, y de algunos de los amigos que hice allí, Nulla, Dermot, Carla y Patrick.

Antes de regresar compré algunos regalos para la familia, y no sé con qué idea, le regalé a mi madre un juego para hacer Café Irlandés, formado por unas copas con marcas con las cantidades que había que utilizar para cada uno de los ingredientes, una jarrita para la nata y un pequeño azucarero. Chulas ¿eh?


Han pasado los años y mi madre, que creo que no usó nunca las copas, me las enseñó el otro día y me dijo si las quería tener yo, y claro, le dije que sí, sobre todo por la ilusión de ver lo que se me ocurrió entonces como regalo y porque supongo que yo daré más uso al juego de Café Irlandés que ella.


Hoy, día de San Patricio, patrón de Irlanda, he decidido preparar en Lazy Blog un par de cafés irlandeses o Caife Gaelach (en su nombre original gaélico) así que vamos allá.

Ingredientes para dos copas

  • 2 tazas de café fuerte, 50 ml de whiskey irlandés (Jameson por ejemplo), azúcar moreno, crema de leche (o nata semimontada) y una jarra de agua caliente.

Cómo se prepara un café irlandés

Lo primero, batimos la nata con las varillas hasta que empiece a engordar, pero sin llegar a hacer nata montada. Calentamos las copas llenándolas con el agua caliente y tirando luego el agua. 

Si tenemos las copas como las que regalé a mi madre, vamos llenando cada ingrediente hasta donde está la marca, pero si no, el proceso es el siguiente:

Ponemos dos cucharadas de azúcar moreno en un cazo y le añadimos el whiskey, calentando la mezcla hasta que casi esté hirviendo. El whiskey (no es lo mismo que el whisky, es la versión irlandesa, con diferente aroma que el escocés)



Rellenamos las copas con la mezcla de whiskey y azúcar hasta un tercio de su volumen y completamos con casi otros dos tercios de café bien caliente.

Para finalizar, añadimos la nata espesa dejandola sobre el café pero para que no se mezclen la echamos sobre el dorso de una cuchara, para que quede flotando en la parte superior de la copa. Se puede espolvorear con canela o con unos granos de café. 

El secreto para disfrutarlo es no mezclarlo y beber el café irlandés a través de la nata

Ahora, brindo por todos vosotros y os deseo Slainte!! Slanje!! Slancha!!! Cheers!!! Salud!!!

Sed felices,